'Un Cisneros nunca paga a sus jugadores'
La casa más poderosa de Poniente. Son los amos del cotarro y sus capacidades superan a las del resto. Cisneros es un club histórico y uno de los grandes clubes ya no madrileños, sino nacionales, siempre gozando de una privilegiada posición en las clasificaciones. Así, actualmente es el equipo más potente de la región habiendo llegado a optar por el título de campeón de División de Honor. Su particular Casterly Rock es el Colegio Mayor Ximénez Cisneros, donde en 1943 se fundó uno de los clubes más vetustos de la capital. A pocos metros disputan sus partidos los de azul y azul, en ese ‘Desembarco del Rey’ del rugby madrileño que es el campo Central de Ciudad Universitaria, sede de los partidos de la Selección Española y también de otro club añejo, Arquitectura, con los que comparten una curiosa rivalidad-alianza similar a las de los Lannister y Tyrell en la saga ahora parodiada.
En esta misma los Lannister son reconocidos por la célebre frase 'Un Lannister siempre paga sus deudas'. En el caso del Cole ellos mismos se enorgullecen de no contar con ellas, al menos en lo referido al pago de sus jugadores puesto que presumen de abanderar una filosofía amateur del deporte y alejada del profesionalismo. Su reclamo no yace en el oro de las minas de Casterly Rock, sino en las muchas posibilidades que el incesto propio de los Lannister, famoso en los mentideros de Poniente, ofrece dentro de las concupiscentes posibilidades del colegio.
Club de Rugby Majadahonda - Casa Martell
En esta misma los Lannister son reconocidos por la célebre frase 'Un Lannister siempre paga sus deudas'. En el caso del Cole ellos mismos se enorgullecen de no contar con ellas, al menos en lo referido al pago de sus jugadores puesto que presumen de abanderar una filosofía amateur del deporte y alejada del profesionalismo. Su reclamo no yace en el oro de las minas de Casterly Rock, sino en las muchas posibilidades que el incesto propio de los Lannister, famoso en los mentideros de Poniente, ofrece dentro de las concupiscentes posibilidades del colegio.
Club de Rugby Majadahonda - Casa Martell
'Nunca doblegado, nunca roto... Sobre todo si eres del femenino'
Majadahonda es uno de los clubes más importantes de Madrid, un histórico español, en especial por sus equipos femeninos. Al igual que en la Casa Martell, los del Valle del Arcipreste son más conocidos por la belleza y las habilidades de sus mujeres, que por las hazañas de sus hombres, en horas bajas al perder su plaza en la Nacional. Gracias a sus féminas, el Club de Rugby Majadahonda seguirá estando presente en la órbita y en la actualidad del rugby nacional. Las majariegas han creado una de las más loables canteras de rugby femenino a nivel nacional, lo que mantiene en pie al primer equipo, acostumbrado en los últimos tiempos a la diáspora de algunas de sus jugadoras más importantes. El trabajo y la paciencia mostrados desde los estratos más bajos del club han propiciado que las mujeres se hayan convertido en el estandarte de la Casa de Majadahonda, por delante de sus homólogos masculinos, rudos rinocerontes que durante esta temporada pastarán y embestirán en la primera categoría del rugby regional.
CAU Metropolitano Rugby Club - Los Segundos Hijos
CAU Metropolitano Rugby Club - Los Segundos Hijos
'He nacido segundo hijo. El CAU es mi destino'
Los Segundos Hijos son uno de los cuerpos de mercenarios más conocidos y poderosos de Poniente, aunque no por ello muestran deslealtad y fidelidad a su nueva familia. Al menos durante el primer año. Si bien los orígenes de gran parte de sus integrantes poco o nada tienen que ver con el de la casa, los metropolitanos han logrado formar uno de los equipos, tanto a nivel de jugadores, como de cuerpo técnico, más temidos de Madrid. Conocidos no por sus cualidades técnicas, que tampoco son limitadas, sino por su despliegue físico, son con diferencia el equipo físicamente mejor preparado de toda la División de Honor B. El CAU, equipo cuya historia lo coloca como uno de los mejores clubes de la capital, mucha faena tiene por delante para perpetuarse en la historia, comenzando por trabajar por una escuela, en donde sus jugadores no tienen opción alguna de competir con otras canteras más poderosas. Sin embargo, y pese a ello, su primer equipo goza de una salud de hierro, y cuya mano, casi siempre firme, los guía hacia el objetivo de seguir codeándose con los más grandes de su categoría.
Continuará...
El club decano madrileño es CD Arquitectura (1931).
ResponderEliminarMuchas gracias. Rectificamos y subsanamos el error, por otra parte, totalmente deliberado. El fondo de reptiles que los Lannister nos tenía preparado era demasiado suculento como para negarse a él.
EliminarJajajajja me parto! Muy bien sacado
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