"Cerrando los ojos podemos recordar a aquellos hombres jóvenes, con esperanzas en sus corazones y alas en sus pies". 'Carros de fuego' (1981), de Hugh Hudson.
El tiempo expiraba, apenas unos diez minutos restaban para abandonarse al deleite de las duchas y la cerveza, cuando una salvaje cabalgada de un jugador cualquiera del XV Hortaleza arrancó el asombro y el aplauso de la grada. Con alas en los pies, imparable, se apresuraba inexorable a la zona de ensayo. Avanzó durante cerca de cincuenta metros haciendo caer a todo aquel que osaba interponerse entre él y su objetivo. Era la sexta marca de su equipo, pero eso poco importaba. Su obstinada, para muchos egoísta, fe en llegar al final es la viva imagen de la esperanza que en sus corazones alberga el resto de sus compañeros. Un equipo de rugby, un club entero, que corre sin mirar atrás con una única ilusión: alcanzar la meta.
Una sola razón les hacía avanzar más rápido que ningún otro: su miedo a perder. Sobre todo ahora, cuando las victorias se han convertido en una bendita obligación. Las derrotas del pasado les habían adecuado para la carrera y así se lo hicieron saber a su rival de esa tarde, Soto del Real; aunque pudo haber sido cualquier otro. En tres minutos el XV ya había gestado dos jugadas de ataque, pero a la tercera fue la vencida y tras conquistar una touch a favor a escasos metros de la 22, Chef arrancaba la almendra de un agonizante maul para colarse hasta la zona de marca (5-0).
Aunque los primeros puntos llegaron a los cinco minutos de juego, el resto de la primera parte careció del ímpetu anotador que tan estimulante comienzo podría hacer pensar a uno. El juego empezó a ensuciarse con innumerables fases estáticas y golpes de castigo, que no conducían finalmente a ningún sitio, pese a que ambos equipos pudieron haber conseguido algún ensayo más. Lo que si sumaron fueron amonestaciones. Un conato de pelea se saldó con dos tarjetas amarillas, una para cada equipo, después de que su medio de melé intentara solventar algún tipo de gestión que parecía haber mantenido con Alexón en lances pasados. Javi López, que merodeaba por ahí, acabó por ser sancionado pese a su intento de mediar en dicha controversia.
Al final, la primera parte acabó como empezó: con el XV irrumpiendo sin pudor los dominios de Soto. Arrebatados, los delanteros abisinios volvieron a cargar contra la defensa de zancudas que, si bien solventaron el primer envite, acabaron por sucumbir cuando la línea de tres cuartos movió el oval hasta el ala, en donde Simic, primero ensayando; y Pira, a palos posteriormente, hicieron los honores (12-0). Para entonces Soto sumaba dos jugadores menos tras recibir unos de sus terceras una nueva tarjeta amarilla.
El asueto llegó molestando, al tiempo que los de Hortaleza se desprendieron del letargo que los de Soto pretendía implantar durante la tarde. De inmediato, el XV armó el ataque colocándose a en la 22 de su rival con una melé a favor. Salida de Chef, desde el 8, y cinco puntos más (17-0). Los serranos buscaron el ensayo con algo más de brío, pero seguía siendo Hortaleza quien atacaba con más peligro. La marca con premio llegó después de que se detuviera el juego por un placaje alto sobre Antón, pesadilla de sus rivales por sus continuas rupturas. El señor de rosa consideró que además del infractor, el centro del XV debía ver también la tarjeta amarilla ya que "había tomado represalias", cuando intentó zafarse del jugador contrario braceando con vehemencia.
En esas que se cobró el golpe. Oval para que los delanteros que se inmolaran. Desde el suelo, entre un amasijo de piernas y abrazos, vieron como su línea de tres cuartos hacía correr el cuero para que McFly, a tiempo, llegara con su DeLorean al in goal (22-0). Después, y en cierta manera, el partido volvió a disputarse en tierra de nadie, con golpes e imprecisiones cometidos por ambos equipos, que dificultaban el dinamismo que los dragones querían conferir al juego. Una dinámica de la que se aprovechó Soto para arañar sus únicos puntos del partido tras un paciente pick & go de sus delanteros (22-7).
Tras dicha concesión, el XV no dio lugar a más dudas y después del saque de centro, Javi López sumaba otros cinco puntos, después de que, por enésima vez, los medios relanzarán a los delanteros cuando el equipo se asomaba a la 22 de Soto (29-7). Luego vino la marca que abre esta nota y la tercera en el cómputo particular de Chef (34-7). Al final, McFly, regresaba a la zona de ensayo antes de que el reloj de la plaza del ayuntamiento de Hill Hortaleza Valley diera la hora, cerrando así la séptima victoria consecutiva de los dragones (39-7).
Alineación: 1. Alexón (16. Darti, 40'), 2. Patxi, 3. Maño; 4. Borja, 5. Brasas (18. Daver, 52'); 6. Javi López (A) (22. Vigas, 67'), 7. Topo (21. McFly, 55'), 8. Chef; 9. Pelusa (m.m) (c) (20. Óscar, 60'), 10. Pira (ap.); 11. Tobi (19. Tito, 47'), 12. Simic, 13. Antón (A), 14. Martins (17. Tamim, 70'); 15. Magia.
Resultado final: XV Hortaleza B 39 - Soto del Real 7.
Anotadores: Chef, 15 puntos; McFly, 10 ptos; Simic, 5; Javi López, 5; Pira, 4 ptos.
Fotografía (de archivo): Laura Ozcoz.
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