"Se aprende mucho de tipos como Eladio, pero en sus anécdotas hay más de leyenda que de realidad"

Esa sonrisa no es de fiar

Han pasado ya casi diez años desde que Pulga, Jaime Palacios Jean-Mairet (Madrid, 1984), levantara algunas cejas entre los más suspicaces cuando acudió a entrenar enseñando su currículum, entrenador de baloncesto en el Liceo Francés y una suerte de emisario de Borrascas. 

"Mi primer año en el XV fue duro, pero yo gané hermanos de por vida y 15 kilos"

El tipo puso definitivamente rumbo hacia rutas salvajes hace ya unos cuantos años, después de que un curso en Alaska destapara sus más intrínsecas predilecciones por morar más allá de la civilización, o al menos estar lo más cerca posible de la nada para poder perderse rápido en ella. Nicolás Fernández-Coppel (1993, Madrid) bajó por las Rocosas hasta que se topó con Calgary, en el suroeste de Canadá, para vivir su particular sueño americano, pero con seguridad social.

"Mi primer partido fue inolvidable. Inundé el campo de lágrimas de emoción"

Mara junto a Menchu y Raquel, fundadores de las khaleesi

Si no fuera por ellas, la prolífica cantera del XV no sería la envidia de medio país. Las madres, que a día de hoy siguen asumiendo un rol predominante en la crianza de los hijos, no contaba con presencia en los campos de Hortaleza, más allá de su animosa participación en las gradas y colaborando con el club en otros menesteres, así que cuando una de ellas se trajo la idea de formar equipo, Mara Carmona (1970, Madrid) se unió a las khaleesi.

"Me acogieron y me formaron, eso me ha dejado el XV, la gran familia que se creó de la noche a la mañana"

"Oye, tú eres muy grande, ¿no? 📷 : José Luis Hernández Sanz

Las historias de quienes marchan a estudiar a la universidad gracias a una beca para jugar al fútbol americano siempre han sonado desde este lado del Atlántico a filme de Hollywood, a una realidad muy ajena a nuestro sistema educativo, pero no tanto a nuestro imaginario colectivo, así que cuando 'Yankee', Miguel Luengo (Madrid, 1974), contó que el destino era Escocia, la película, aunque nos sonaba, tenía un final inesperado en este tipo de historias. 

"Tenía que volver, ellas estuvieron para mí cuando lo necesité"

Las melés, el lugar de la gente chévere

Hubo un tiempo en el que una pintiparada y tímida aspirante a jugadora de rugby se animó a dar el paso tras un año indagando qué era ese "rarísimo deporte" que practicaban en un parque unas "chicas tan grandes".  Aquella suerte de amazonas chismorrearon que no duraría ni cinco días, pero lo que tampoco sabían era que Yenifer Rodriguez Silvera (Venezuela, 1996) ya había tomado "una de las mejores decisiones" de su vida.

A por el Cobre (10-20)

Hortaleza Hools, semper fidelis

Los del dragón lograron el billete para la final de Cobre tras imponerse en Getafe en un accidentado y lluvioso encuentro que en ocasiones se asemejó a una escaramuza universitaria cualquiera, con tipos y el balón más veces en el suelo de las que son recomendables si se pretende darle cierta enjundia deportiva a un partido de la segunda regional madrileña (10-20).

"Para mi es una gran oportunidad poder ayudar en el desarrollo del rugby en Guinea"

El Depor tenía a Rufai, el XV a Jefrei

Durante años formó parte de una recordada primera línea de Hortaleza en la que pacían otros grandes mamíferos de la talla de Kiko o Yankee, lo cual no impidió que sus bufidos resonaran entre los de sus compañeros de vanguardia. Pedro Marcos Bico Mbasogo (Las Palmas de Gran Canaria, 1991), más conocido como Jefrey, ahora, en su vuelta a casa, centra sus esfuerzos en ayudar a desarrollar el rugby ecuatoguineano.

El Rojo se queda a un suspiro de hincarle el diente al líder (25-17)

Kiki, curtido ya en los gimnasios más macarras de Hortaleza

El Rojo ha puesto punto y final a la temporada regular regalando a su incondicional grupo de alborotadores un verdadero final de fiesta ante Soto, a la espera de esa suerte de epílogo copero con nombre de algún deslucido metal que se celebrará en las próximas semana. El líder del grupo resopló más de lo que previó y acabó pidiendo la hora ante su afición, a la que sobrevino una repentina mordaza en los compases finales (25-17).

Se la debían a Chencho (XV Rojo vs Guadalajara 17-10)

Para la siguiente de Jumanji

Hacía varios años que el Rojo no disfrutaba de una mañana como la del pasado domingo. Acostumbrado durante los últimos tiempos a los infortunios y los escandalosos traspiés, el segundo equipo de Hortaleza disfrutó como no se recordaba al superar el reto que supuso medirse con Guadalajara Jabalí (17-10).

El Rojo se divierte al sol de Las Terraza (10-48)

El Rojo se reencontró con sensaciones pasadas después del tropezón ante Tres Cantos y el último parón semanal en su visita del domingo a Alcobendas, en donde la veteranía de su tercer equipo acabó por claudicar frente a la mayor velocidad y agilidad de manos de los dragones (10-48).

"Ahora mismo me interesa más que aprendan y disfruten que ganar a cualquier precio"

El pasado pirata de Facu

Quien trata con él por primera vez acierta al manifestar que se trata de un tipo tranquilo, una suerte, si se permite la referencia futbolística en un cuaderno como este dedicado al oval, de Miguel Ángel Lotina y Marcelo Bielsa, como se escuchó una vez por el vestuario, pero con chándal del XV y sin el derrotismo del español y el trascendentalismo que destila el argentino. Facundo Marqués (Rosario, 1971) es la nueva apuesta del club para volver a DHB.

Primer acto fallido (19-10)

Tito

El Rojo se las vio el domingo con su particular disyuntiva shakespeariana en la localidad vecina de Tres Cantos. El dilema al que se tuvo que enfrentar Hamlet rondó las cabezas de los muchachos de Hortaleza durante las pruebas de la semana y fue máxima entre las bambalinas de un encuentro, en el que, esta vez sí, el equipo tendría la ocasión de medir sus fuerzas con un equipo de cierta envergadura y definir si esta temporada se puede llegar a ser, o quizás, no.

"El XV fue una fuente inagotable de grandes personas para mi vida"

Más público que en Murrayfield

A veces se necesita bien poco para sentirte como en casa. Julián Murua (Córdoba, 1996) lo tuvo fácil cuando llegó de su Argentina natal a las cuevas del XV. Él también hizo lo suyo, se acopló rápido a la rutina del club y se convirtió en uno de los pilares destacados de la aventura del equipo por DHB. A pesar de que su paso por Hortaleza duró poco, son muchos los que se acuerdan todavía de aquello.

El Rojo se pega un homenaje

Llevan bigote debajo del pantalón

Hacía mucho tiempo que no se veía una jornada como la pasada en los campos de Hortaleza. Acostumbrados a la caída, tanto el Rojo como el primer equipo parecen disfrutar en las últimas dos semanas de una suerte de vergel en su particular periplo por el desierto, a la espera, ambos, de conocer si se trata del espejismo propio que te enreda en la estéril abundancia, o más bien el hallazgo hacia rutas menos hostiles. 

"El rugby también discrimina, no es la excepción, pero se está avanzando al respecto"

Manejando el cotarro

La universidad siempre fue amiga del oval, cuna de una interminable lista de jugadores adoptados más tarde por los clubes, e incluso origen de muchos de ellos. Los motivos por los que muchos deciden tener su primer contacto con este deporte revolcándose en estos lodos --se nos viene a la cabeza Cantarranas-- son diversos y de lo más variopintos, es el caso de Rocío Jiménez (Murcia, 1991), quien empezó con esto del rugby en la Facultad de Matemáticas "porque parecía que eran quienes movían el cotarro".

"Es inevitable pensar en lo que ocurrió y en la suerte que tuve, pero espero que eso vaya despareciendo"

"Hemos vuelto como Skynet"

Que los chicos de Hortaleza, tanto el primero como el Rojo, lograran ganar un partido más de un año después no sido la mejor noticia que el club ha recibido esta semana. Juan Simón (Oviedo, 1989) volvió a pisar un campo de rugby tras su accidente de la temporada pasada. Sin hacer ruido y siendo paciente, el tipo ha aprovechado la pandemia para ponerse al día. 'Ha vuelto como Skynet', y ha traído un T-800 con más fuerza.

El Rojo saborea las mieles del triunfo un año después

Un año desde que no se oían esos bramidos

El XV Rojo se ha reencontrado con la victoria un año después. El triunfo del domingo frente a IEU Athletics (31-15) como bálsamo tras un año de pandemia, fechas aplazadas, canceladas, entrenamientos sin partidos a la vista, medio equipo recogiendo nieve y un duro y correctivo estreno ante Soto.

"Mi objetivo es poder jugar un partido con mi hijo"

Larios echando un ojo

El rugby tiene una cuenta pendiente con los rebotados, con los que pasaban por ahí, con aquellos que simplemente estaban en el sitio adecuado en el momento idóneo. Sin ellos, al menos en España, este deporte se habría perdido a una tumultuosa amalgama de neófitos incondicionales, de los que todavía creen en esa ya manida mística que rodea a todo lo que el oval alcanza, de los que hacen proselitismo y presumen de heridas de guerra de fin de semana, de los que dignifican un poco todo esto en tiempos de farándula. Fernando Rodríguez Larios (Madrid, 1976) es uno de ellos.

El Rojo no se va de Copas

Que antes del partido de Copa frente a Soto estuvieran las cigüeñas sobrevolando el lugar bien hubiera servido de presagio de la que se avecinaba. El equipo que mantiene en cautiverio a una de estas zancudas en su escudo fue el único sobre el terreno durante al menos un parte del juego en aquel frío sábado por la tarde que a más de un dragón heló las escamas (48-19). 

"Estoy completamente seguro de que el Rojo va a ser un equipo con mayúsculas"

El tipo con el que hemos hablado hoy llegó casi de casualidad a esto del rugby y cayó en Hortaleza porque era del barrio. Desde el club tienen suerte de que Chencho (Madrid, 1977) no se haya criado en Fresno de Torete. Tanta o más de la que tuvieron en el Rojo cuando a falta de capitán pasaba por ahí y se propuso para el cargo. Sin duda los mejores años del segundo equipo fueron con él llevando la voz cantante en los corrillos.